Algunos me han preguntado el objetivo del Grupo que se ha creado en WhatsApp hace algunas semanas, con 128 miembros al día de hoy, de 15 Estados de la República Mexicana.
Hay que recordar que la Red de Profesionistas Católicos (RPC) fue creada el 2 de febrero de 2007 en Monterrey, con el objetivo de ser una plataforma de proyectos, ya sea individuales como colectivos, por parte de profesionistas que no suelen tener tiempo -en medio de sus actividades cotidianas- para integrarse a grupos o movimientos, ir a reuniones y participar de actividades para las que sus agendas no permiten cabida.
Claro que se fueron integrando todo tipo de colegas y de todo tipo de espiritualidades, algunos ya con apostolado, otros sin él, otros integrados a movimientos o grupos, otros no.
Esto mismo ha sucedido en esta conformación del Grupo de WhatsApp: Los hay profesionistas de todas las edades, etapas y áreas profesionales, incluyendo desde algunos estudiantes universitarios hasta algunos pensionados o retirados.
Es un mosaico maravilloso que nos hace ver que Cristo ilumina corazones que le responden y siguen desde todo tipo de formación intelectual.
Es por ello que se hacen vigentes los fines y metas de la Red, que en su momento aparecía como una forma sui generis de organización, sin Comité Directivo y con solo un Coordinador, trabajando de manera muy libre.
De a poco pasamos de la Pastoral de la Cultura a Pastoral Social dentro de la Arquidióceis de Monterrey, como un grupo Arquidiocesano.
En esta nueva etapa, su expansión a nivel nacional es para logar estrechar lazos con muchos colegas que -a veces- están desanimados porque no conocen profesionistas católicos, o no abundan en sus comunidades, a las que les cuesta integrarse con sus dones profesionales, ante formas hieráticas de organización, tradicionalmente clericales, que limitan algunas veces el despliegue de esas capacidades, conocimientos y habilidades a nivel eclesial.
Por ello se apunta a la realización de proyectos, ya sea de manera conjunta, ya sea manera individual, siendo una plataforma de lanzamiento de los mismas, tanto a nivel eclesial como civil. Estos proyectos pueden ser de cualquier tipo o forma, pero siempre en la clave de la evangelización o del servicio de la Pastoral Social en sus multiformes formas de manifestarse (desde la formación en Doctrina Social de la Iglesia hasta el trabajo con los más necesitados, pasando por proyectos comunicacionales, culturales, de servicio a las familias, etc., etc.).
La participación propiamente en la vida secular queda garantizada usando el sello RPM, o sea, Red de Profesionistas de Monterrey, Red de Profesionistas Mexicanos en esta nueva etapa. De este modo se ofrece la oportunidad de usar una u otra sigla (RPC o RPM) para adherirse a iniciativas eclesiales o ciudadanas, según sea el caso.
De este modo delineamos de una manera peculiar el por qué de la existencia de esta Red, que puede constituir un carisma sencillo pero a la vez maravilloso para que muchos profesionistas pongan sus dones al servicio del Reino y hagan fructificar sus talentos, no escondiéndolos o guardándolos para sí mismos.(Cfr. Mt. 25, 14-30)
Dr. Daniel Jorge Sanabria Barrios
Iniciador de la Red de Profesionistas Católicos/Red de Profesionistas Mexicanos
