¡Hola Matías! Aquí
retomando la comunicación contigo, ¿Todo bien? Espero que sí.
Continuando con lo de
carta anterior, ahora te cuento sobre el tema de los procesos electorales, que
son regidos por el llamado Instituto Nacional Electoral (INE).
Más de 20 candidatos han sido
asesinados en la precampaña y en la campaña misma rumbo a esta elección del
2024. Claro, todo unido a que quienes mandan (el crimen organizado) están en
terreno buscando siempre dejar en claro quién dirige y que hay que negociar con
los que les dicen los ¨meros meros¨, o sea los superiores.... o sea los líderes criminales.
Esto significa que, aunque
tenga protección una persona ante amenazas, puede bien no significar nada, pues
han utilizado (así también lo han hecho con otras personas protegidas, como
periodistas o activistas) el viejo método de ¨liberación de terreno¨ (o sea,
desaparece la seguridad y en esa ventana de tiempo los sicarios hacen su
¨trabajo¨).
Los procesos electorales
suelen estar acotados, pero financiados con fondos públicos a través de
partidas millonarias del presupuesto de la Federación.
Suelen ser procesos
caóticos, en los que en general se contratan personas para hacer campaña. Hay
militancia, pero se suelen pagar aparatos de trabajo con el dinero que se
percibe antes de la elección.
Son procesos en los que
las plataformas suelen ser hechas por los dirigentes y cuadros, con pobre o
nula participación técnica.
Suelen hacerse propuestas a
destajo, compitiendo por el que dice lo más generoso o impresionante, la
promesa más abultada, y así. No dejan de constituir un hazmerreir de
ocurrencias proferidas por personas muchas veces ignorantes o sencillamente
escogidas por los partidos porque se les conocen públicamente (así, por
ejemplo, un jugador de fútbol muy conocido llegó a ser Gobernador de un
Estado). La gente se suele dejar llevar por los circos mediáticos que estas
personas suelen armar y que arrastran con su sola fama de famosos o conocidos
(aunque de política no sepan ni jota).
Son miles de puestos de elección de todos los niveles cada 6 años como ahora, y luego hay procesos electorales intermedios (cada 3 años), aunque hay elecciones estatales fuera de
estos tiempos.
En dichas elecciones si
bien no es como en el siglo pasado, que casi se marcaban los votos o se
¨embarazaban¨ las urnas (se ponían más votos que votantes, o bien votaban
misteriosamente muertos, también) hay formas de coaccionar el voto.
Una de las más comunes es
pedir la foto del voto que se deposita en la urna para acreditar que uno votó
por tal o cual partido y así asegurar una despensa (o canasta familiar), o un
dinero que se le puede dar en efectivo o en una tarjeta.
En fin, esto es solo parte
de algo más grande, que te estos y tratando de desgranar para que lo entiendas.
En la que sigue te sigo
explicando…
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